Hace unos años, un joven canario disfrutaba de un baño en una de las maravillosas playas que tiene nuestro archipiélago canario. Decidió ponerse el snorkel y disfrutar de las grandes vistas que ofrece nuestras aguas, con tanta mala suerte que una pequeña corriente le da un susto y lo arrastra hasta una playa de arena situada no muy lejos de donde se encontraba, o eso creía el, hasta que al ver lo que le rodeaba se dio cuenta que se encontraba en la Isla de San Borondón. A pocos metros de él había unos habitantes de la isla que enseguida se acercaron y le ofrecieron toda su ayuda, así como su amabilidad y lo acompañaron a otro lugar de la playa más tranquilo para que descansara, donde había otros habitantes de la isla cocinando un líquido raro o poción, dentro de una gran marmita, que desprendía un aroma único que le llevaba a sentirte como en casa. Poco después de terminar la preparación de aquel elixir, se lo dieron a probar y era sencillamente espectacular, le quitaba la sed y además le dejaba un sabor de boca muy rico, sin contar que le llenaba de energía y positividad. Los habitantes de la isla, al ver que aquel náufrago quedaba deslumbrado por su elixir, decidieron regalarle varias fórmulas del mismo, para que se lo llevara a su isla y pudiera compartirlo con el mundo entero, así lo hizo y así nació Machango Drink.